NETFLIX: The end of the f-ing world / Doctora Foster / Kingdom

Por: Mónica Heinrich V.

THE END OF THE F-ING WORLD

Este es el tipo de título que hace que una parte tuya, la más negra, la virulenta, la harta de la irresponsabilidad ajena (#QuédenseEnSuCasaPerros y si salen porque no hay otra #ProtéjanseConBarbijosYguantesPerros) le grite a la pantalla y a Netflix “Sí, que se acabe de una vez el cochino mundo”.  Porque reconozcámoslo, hay preocupaciones más allá de la enfermedad y relacionadas con el futuro que no están dejando dormir a más de uno. Y el mundo no se va a acabar, y la vida va a seguir.  Para eso, para evadirte de esa corrosiva pregunta de “qué irá a pasar cuando (rellene su miedo favorito en esta pandemia)”… existen las series. Esta serie.

Soy James, tengo 17 años y estoy muy seguro que soy un psicópata”, dice uno de los protagonistas con Laughing on the outside de Bernardette Carroll sonando de fondo a todo trapo. James (Alex Lawther), un chico que a los 8 años descubrió que no tenía sentido del humor se topará tarde o temprano con la otra protagonista, Alyssa (Jessica Barden) una compañera de colegio que dice “No confío en la gente que se adapta”, acosada por su padrastro y con una mamá que finge que no ve los acosos mientras Where is Love de The Monzas suena, también, a todo trapo.

Yo vi la serie el año pasado cuando aún había planes a futuro para el 2020 y la gente no se estaba muriendo en bollo por paros cardiorespiratorios y por falta de respiradores.

Está basada en la novela gráfica homónima de Charles Forman, que también ha escrito la novela gráfica de Im Not Ok With This, estrenada recién en Netflix. Les dejo acá The End Of The Fucking World (EN INGLES) porque soy una sentimental y como tenemos harto tiempo libre podrán leer y ejercer el odioso oficio de la comparación. De ese oficio hablemos en los comentarios si quieren, y tienen ganas y no están persiguiendo sombras chinas en la pared.

 

La serie de Netflix, por su parte, tiene dos temporadas. Cada una de ocho episodios que duran entre 19 y 20 minutos. Charlotte Covell (Charlie) es la guionista. Charlie tiene ya una carrera como actriz, aunque eso no ha impedido que se encargue de escribir todos los episodios de The end of the f***ing world. Sigue la estela ácida y desoladora de la novela gráfica pero le imprime un sello y hace cambios que a mi juicio funcionan para el lenguaje televisivo.

La primera temporada es muy buena. Al final se fue al pasto, sí, pero manteniendo la tónica de la historia.  Una de las cosas más cuestionables , créanlo o no, es la peluca de la pobre Alyssa, no podés decir que alguien se cortó el pelo más lacio que lamido por una vaca y ponerle una peluca ondulada. Ese detalle me distraía constantemente. ¿Por qué no le pusieron otra peluca? ¿Por qué no le cortaron el pelo de verdad? ¿Por qué no le plancharon la peluca? Tantos Porqués.

La segunda temporada siguió siendo encantadora, y ya no había peluca, pero James y Alyssa se volvieron cursis. No tengo nada contra los cursis, bueno, sí. Siento que serían los peores compañeros de Apocalipsis zombie del mundo. El asunto es que el aspirante a psicópata que conocimos en la primera temporada, ese mismito, no puede vivir sin Alyssa y Alyssa, a pesar de estar por casarse, también anda en las mismas. Creo que no hay una sola escena entre esos dos donde no esté sobre el tapete imaginario el hecho de que se aman. Cursis everywhere.

El personaje de Boonie (Naomi Ackie) cumple un rol antagonista aunque es muy poco creíble y las situaciones que ya de por sí eran bastante boludas alcanzan un nuevo escalón de sinsentido. Puedo soportar el sinsentido del sinsentido en este mundo cruel y pandémico, pero paremos un poquito.

En todo caso, las actuaciones del cast (los chicos están fantásticos) así como la banda sonora vintage, su fotografía, su paleta de colores, y los conversaciones simpáticas del par de cursis, hacen que la experiencia sea intensa y entretenida. Estarás con tu dedo pandémico pulsando el play y el next hasta finalizarla. Creo que en las condiciones de cuarentena actual te la podrías despachar en un día.

De nada.

Lo mejor: humor negro, entretenida y una gran banda sonora Lo peor: la peluca, y cómo se va yendo al pasto  Lo más falsete: la peluca y algunas situaciones El mensaje manifiesto: no pongás una peluca de mala muerte a tu personaje principal  el mensaje latente: el espectador ya distingue pelucas reales de cabello normal El personaje entrañable: el papá de James, me daba mucha pena El personaje emputante: sí, sí, LA PELUCA El agradecimiento: por el humor negro que nunca está de más.

Opción alternativa para verla online gratis: https://www.pelispedia2.tv/episodio/1-01-the-end-of-the-fucking-world/

DOCTORA FOSTER

Si de puteríos se trata, pocas veces he visto un puterío tan oscuro y retorcido como el de Doctora Foster. Esta es otra serie inglesa que en su momento me hizo preguntarme, plantearme, pensar, meditar, cosas sobre el ser humano. Hola, humanito.

Tenemos a Gemma (Suranne Jones) que se encuentra bien. Digamos que como cuando la gente creía que el virus no llegaba a Santa Cruz porque era un lugar caluroso. Es una respetada doctora, tiene un marido al que adora, un hijo, una buena vida. De pronto, Gemmita empieza a sospechar que el marido anda champando fuera de la casa. Oh, oh. Y esa sospecha tan cliché te hace resoplar como espectador pensando que te has equivocado de serie y que para ver las histerias de una tipa o las hijueputeces de un tipo, mejor escuchás algun chisme de cocina de tu círculo inmediato, pero adivina qué… la paciencia te paga.

Lo que parece muy cliché termina con el episodio uno yéndose hacia otro lado, hacia un lado que no esperabas que una historia así vaya. Y verás el deterioro mental de Gemma, el deterioro de la pareja, y la podredumbre de lo que no conocía. Verás cuán hija de puta puede ser una persona y cuán bajo se puede caer. Verás que lo que pensás es el final de una relación tiene más sótanos ocupados que la casa de Parasite.

Sos un hijo de puta y todos lo sabemos

Inspirada por el mito de Medea, Doctora Foster es una serie muy difícil olvidar. Yo la vi hace ya bastante tiempo, puede que año y medio o dos años y aun no la olvido. NO TE OLVIDO GEMMA. NO TE OLVIDO.

Son solo dos temporadas cada una de cinco episodios que serán una montaña rusa de emociones. A destacar la presencia, como la infame “otra”, de una jovencísima Jodie Comer (Killing Eve) . Me encanta Jodie, y aunque su papel de Kate Parks no es tan desafiante como el que hace en Killing Eve, tiene sus momentos brillantes.

Creada por Mike Battler, se ha hablado de una tercera temporada que no ha llegado porque aparentemente Mike no tiene la necesidad de seguir contando la truculenta historia de Gemma. Demasiada oscuridad para un mundo oscuro.

La primera temporada es de relojería suiza en cuanto a climas y situaciones, la segunda cae un poco, después de todo se ha estirado la historia, pero el final…el final…

Estos ingleses saben.

Lo mejor: Descarnada Lo peor: cómo lo bueno de una relación puede irse tan a la mierda  Lo más falsete: la temporada dos tiene sus bemoles El mensaje manifiesto: nunca se termina de conocer a otra persona  el mensaje latente: nunca te terminas de conocer a vos mismo tampoco El personaje entrañable: ese pobre hijo en manos de gente enferma El personaje emputante: Simon ¡cómo te detesto Simon! El agradecimiento: por momentos de intensidad inesperados.

Opción para ver online: https://seriesyonkis.org/episode/doctor-foster-1×1/

(el sitio tiene un poco de publicidad subidita de tono, pero A NADA)

KINGDOM

Tengo un placer culposo que muchas veces se convirtió en displacer pero que me ha sido imposible abandonar. Sigo viendo The Walking Dead. Sí, ya sé pequeños amigos imaginarios: la serie se fue a la mierda más rápido de lo que creíamos. Yo diría que con la muerte de Shane iniciamos un camino en bajada que parece no tener fin y la temporada del año pasado alcanzó niveles de profundidad insospechados. Y no, no puedo soltarla. Es como decía Sheldon Cooper en The Big Bang Theory, “una serie es un compromiso que hay que cumplir”. Así fue como vi a Sheldon recibir el Nobel en el final de su serie. Esta información bochornosa tiene su razón de ser más adelante, para luego poder jugar con las odiosas/ociosas comparaciones.

Entonces, producto del morbo (oh, divino morbo) que ha despertado en la gente (en mí) ver películas o series relacionadas a virus y enfermedades, hace un par de días «resfalé» con Kingdom. Y han sido un par de días porque tampoco da para colgarse de ella, sino para mirarla espaciadamente. Son capítulos de casi una hora, todos llenos de muerte, sangre y terror. Y el morbo empuja pero también detiene.

Kingdom es una serie coreana. Está dirigida en siete episodios por Kim Seong-hun a quien ya conocía por dos películas: El túnel y A hard day, ambas películas bastante entretenidas; y hay otros cinco episodios que son dirigidos por Park In Je, a quien recién descubro.

Me sorprendió pillar en los créditos a Kim Eun-hee como guionista, lo conocía porque escribió ese dorama llamado My Fair Lady que me vi de principio a fin y que en su época (2009) fue uno de los doramas más caros jamás filmados. Me sorpendió porque además My Fair Lady era un dorama de comedia-romance y Kingdom, aunque tiene algunos momentos de humor, es pues otro estilo. Sangre, visceras y bichos.

Vamos a los bichos, que es lo que nos interesa. Resulta que el asunto está ambientado en la época de la dinastía Joseon. Los coreanos se toman muy a pecho el temita de la realeza. Los amo. El Rey está enfermo de viruela y estira la patota, a los conspiradores-usurpadores se les ocurre revivirlo a través de la Planta de la Resurrección en la espera que la panzota de la Segunda Reina entregue al reino un nuevo hijo legítimo y así el sucesor natural hasta ese momento, el hijo bastardo del Rey, se quede sin trono.

Los conspiradores usurpadores son parte de un clan lleno de poder y bastante maquiavélico, el Príncipe heredero se ve pronto envuelto en una persecución y en la propagación de la enfermedad producto del uso chabacano de la Planta de la Resurrección. Hay un montón de metáforas y equivalencias de las que podríamos hablar, pero estamos sensibles y mejor guardar las lágrimas para mejores causas.

A diferencia de The Walking Dead estos bichos corren como si estuvieran vivos a toda velocidad. No siempre pueden contagiarte la enfermedad. Y sus hábitos o comportamientos se van revelando mientras la serie avanza. Luego de sus similitudes con The Walking Dead, sentís algo cercano también a Juego de Tronos, las traiciones, la pelea por el trono, los herederos legítimos, los bastardos, etc.

Al desarrollarse en una sociedad monárquica se hace mucho énfasis en temas de clase, dinero, poder. Así que además de ser una serie de zombies hay algunos momentos que son interesantes desde el punto de vista histórico.

Estoy fascinada con el vestuario y el arte de esta serie. Los sombreros me hacen sonreír cada episodio. O tal vez sea solo la cuarentena y la necesidad de ver algo bello y no dejarme llevar por la necesidad de llorar en el baño. Nunca lo sabremos.

Sí, sí, en líneas generales sigue lo ya planteado en historias de zombies como The Walking Dead o cualquier otra serie de este tipo. En un inicio el poder de The Walking Dead estaba en la construcción de sus personajes, algo similar ocurre acá, no son solo los bichos, queremos saber qué pasa con ese pobre hijo bastardo del Rey, con ese pueblo asolado por el hambre, explotado y a su vez abandonado por sus gobernantes, con la médica que conoce todas las plantas, con el misterioso secundario experto en armas, con los nobles y políticos tomando decisiones inhumas.

Ah, qué panorama. Un espejo en el cual podemos mirarnos… casi tan reluciente como el salar de Uyuni en temporada de lluvia. Ah, qué panorama.

Lo mejor: entretenida, hermosamente filmada, intensa Lo peor: es un entretenimiento bastante ligero  Lo más falsete: hay situaciones en que sería imposible que no mueran comidos por los bichos, pero siguen vivitos. Hay decisiones que no condicen con el perfil de los personajes, por ejemplo la decisión final respecto al heredero al trono. Sentimentalismo al pedo. El mensaje manifiesto: la angurria de poder siempre libera monstruos insospechados  el mensaje latente: esos monstruos después no los para nadie El personaje entrañable: el misterioso personaje que sabe de armas y caza tigres. Gran compañero de cualquier apocalipsis zombie El personaje emputante: la ayuca de la reina, qué pendeja más llunku El agradecimiento: por el arte, el vestuario 

Opción para ver online gratis: https://repelishd.tv/serie/kingdom/

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5 Comentarios

  1. TEOTFW: temporada 1 (Buena, un enfoque diferente que me devolvió una pequeña esperanza en el ser humano)
    temporada 2 : abandonada desde el capitulo 2, ¿por que le metieron cursilería rosa? por queeee?

    Doctora Foster : no la vi

    Kingdom: Una belleza, jaja me ayudó a superar el final de Juego de Tronos, condenados D&D aprendan de los coreanos.

    • Guillermo, TEOTFW pucha pudiste abandonarla? para mí es casi imposible abandonar una serie. MIRA DOCTORA FOSTER! y me comentás que te parece y qué bueno que te gustó Kingdom yo la vi empezando la pandemia y la verdad me enganchó un montón, espero con ansias su nueva temporada.

  2. […] Participan también Ben Affleck como el disoluto Pierre D´Alencon. Ben iba a interpretar al mismísimo Le Gris para compartir pantalla con Matt, pero por conflictos de cronograma tuvo que conformarse con ser el noble compañero de chupa y farra de Le Gris. Otra sorpresa en el casting es Alex Lawther que interpreta al Rey. A Alex lo hemos visto como protagonista de The end of the f*cking world, reseñada ACÁ.  […]

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