Por: Eva Sofía Sánchez
En la portada de Double Fantasy, John y Yoko unen sus labios y cierran los ojos. El esbozo de una sonrisa se hace visible en sus rostros. La mano de John toma con delicadeza la nuca de Yoko. Ella exhibe unos sencillos aros de plata y un collar con un pequeño corazón. Él usa el cabello un tanto largo, tal y como lo tenía en las primeras épocas de Los Beatles. Ambos visten ropa oscura. La imagen está registrada en blanco y negro. Es 1980.
Si una fotografía retratase al amor, podría ser esta.
Para Lennon (ex Beatle, estrella de rock desde los 22 años, activista por la paz, ‘enfant terrible’ de los escenarios, provocador profesional), la década de los 70 se dividió en dos etapas. La primera transcurrió hasta 1975 y estuvo colmada de música, escándalos y excesos. Lanzó su primer disco solista, inspirado en la terapia del grito primal. Compuso ‘Imagine’. Lideró campañas contra la guerra. Pero lo que definió esta época fue el ‘fin de semana perdido’. Durante dieciocho meses Ono y Lennon se separaron. Él se mudó a Los Ángeles con otra mujer. Grabó un disco junto a un Phil Spector paranoico y recluso. Produjo canciones para un David Bowie narcotizado. Registró otro álbum compuesto por clásicos del rock and roll. Formó un dúo alcohólico con Keith Moon, baterista de The Who. Fue expulsado de bares y hoteles.
Así fue hasta 1975, cuando Ono lo aceptó otra vez en el edificio Dakota. Inició entonces la etapa del ‘padre y panadero’. La pareja tuvo un hijo y le llamaron Sean. Yoko se encargó de los negocios de la familia. John se quedó en casa para criar al bebé. No concedió entrevistas. No produjo nueva música. Se mantuvo alejado de los escenarios. Durante esos años, alcanzó la paz que ansiaba encontrar desde sus 22, cuando se convirtió en un Beatle y algo dentro de él dejó de pertenecerle.
En 1980 la pareja lanzó Double Fantasy. El disco presentó algunas de las canciones más emblemáticas y sinceras del Lennon solista, como ‘Woman’, ‘Im losing you’, ‘Beautiful boy’ y ‘Watching the wheels’. Tal vez uno de los temas más representativos fue ‘(Just like) starting over’. En él cantó: ‘Nuestra vida; juntos. Es tan preciosa; juntos… Extendamos nuestras alas y volemos ’.
Fue un álbum que habló de la familia y el amor.
En una entrevista para la revista Playboy, realizada poco antes del lanzamiento del disco, un periodista le preguntó: ‘¿Cuál es el sueño de los ochenta, Jhon?’ Él respondió: ‘Tú produces tu propio sueño… No hay nada nuevo bajo el sol. Yo no te puedo despertar. Tú te puedes despertar. Yo no te puedo curar. Tú te puedes curar’.
Double Fantasy salió a la venta poco tiempo después de la entrevista. Tres semanas más tarde, a las once de la noche del 8 de diciembre de 1980, Lennon fue asesinado mientras ingresaba a su hogar. La historia del hombre que le quitó la vida y sus motivos dieron pie a especulaciones e historias macabras. Esa noche, el mundo sintió que parte del sueño de los ochenta se fue con él. Había encontrado la serenidad y el equilibrio; había aceptado la familia y el amor. Estaba en paz. Tal vez fue un buen momento para extender las alas y volar.