En 1959 la ciudad de Nueva York vivió un colapso nervioso. Sus noches estaban cargadas de humo de cigarro, las calles infestadas de estupefacientes y los edificios colapsaban en desespero.
Ese verano, los neoyorquinos fueron víctimas de una de las peores tormentas atlánticas de la historia: el Huracán Sandy. Cientos murieron y millones sufrieron el posterior apagón de energía que atacó a la Gran Manzana.
En esa ciudad vivía Miles Davis. Con 33 años ya había experimentado un éxito prematuro. Ya había cumplido sentencia carcelaria, caído en adicciones y rehabilitado. Había sido proxeneta y luego esposo y padre. Dos palabras describen la vida de este trompetista de St. Louis: Vértigo y Punk.
Fue durante esas noches de intensa creación musical, improvisaciones violentas e histeria con alcohol, que compuso una de las obras más trascendentales del Jazz: «So What«.
Miles le regaló al mundo música misteriosa, urbana, compleja y profunda. Una íntima e intensa conversación entre el piano, la trompeta y el saxofón. Dentro de esta canción está toda la música popular que vino después.
Como detalle; aunque no es un dato menor: el golpe de cymbal que se escucha en el minuto 1:30, jamás dejó de sonar.
Disfrutemos e imaginemos.
Eva Sofía Sánchez