Por: Mónica Heinrich V.
Francis Ford Coppola, aclaró el contenido del film al lanzar esa famosa frase «No es sobre Vietnam, ES Vietnam», y no le falta razón al hacer tal afirmación. Había escuchado elocuentes comentarios que me decían que era LA película sobre Vietnam. Al haberme cobijado en los brazos de la ignorancia durante tanto tiempo, tenía mis expectativas al respecto. Ustedes saben, cuando han jodido tanto tiempo con la cantaleta de que «tenía», «debía», «necesitaba», era una «obligación» verla, las cosas comienzan a tomar tintes extraños.
Entonces, un buen día, me armo de valor y la veo. Para empezar diré que me decepcionó un poco, quizás me esperaba mucho…y ese ha sido el gran problema, sin embargo reconozco sus virtudes, que son muchas y las tiene muy bien puestas, sin que esto deje de obligarme a hacer una reflexión personal que desarrollaré de acuerdo a la experiencia vivida.
Primero, hablemos de la producción. Ríos de tinta han corrido hablando sobre lo difícil y lo desesperante que fue la filmación, sobre los problemas que se dieron, sobre el desasosiego que invadía a Coppola de vez en cuando ante tantos obstáculos. Recordaremos que la historia se basa en el libro Heart of the darkness del escritor polaco Joshep Conrad, donde Conrad hablaba sobre el imperialismo belga.
A su vez, mi estimado Orson Wells había planeado una adaptación radiofónica que se quedó en veremos. Coppola, en 1967 tiene su primer acercamiento a lo que sería Apocalipsis Now, en un principio la dirección iba a estar a cargo de George Lucas, las cosas no se dan porque Lucas filma Star Wars 7 años después, Coppola tarda en conseguir los millonetes que se necesitarían para la producción y se tarda 8 años en concretar algo, ahí es cuando Coppola decide finalmente largar los pesos él mismo.
Todo bien. Nuevo problema a la vista, esta vez con el guionista, un tal Millius quien no supo plasmar la onda antimilitarista que quería Coppola, por lo que se requiere una reescritura del libreto. Luego, a buscar reparto. Pacino no quiso, Robert Redford tampoco y Nicholson peor.
Finalmente consigue a Harvey Keitel quien abandonará el proyecto después de que la producción lo dejó olvidado en medio del monte un día de grabación. Entonces, como de milagro surge Martin Sheen, casi casi un don nadie por esas épocas, Coppola lo mira de arriba/abajo, le da el OK, y el pobre Sheen se traslada a Filipinas. Sheen interpreta al archiconocido Willard.
Pero y Kurtz??? se barajan nuevamente nombres, Pacino vuelve a decir que no, se piensa en Marlon Brando, se le largan unos cuantos millones (de esos que ya estaban escaseando como parte del presupuesto) y Brando llega con casi 130 kilos de su humanidad, para shock de los que estaban por ahí, parece ser que nadie se imaginaba que Brando había estado come que come que come, y ya teniéndolo en medio de la selva filipina, con sus millones pagados, ni modo que lo devuelvan no?…hacer de tripas corazón otra vez.
Sheen sufre un infarto, y casi muere arrastrándose buscando ayuda. Un huracán destruye parte de los sets, el presupuesto se dispara por los cielos, Coppola anda al borde del suicidio, con desnutrición y problemas maritales, sin contar su casi bancarrota.
En fin…realmente fue Vietnam. Se reconoce, que debe haber sido toda una lucha filmarla. El rodaje termina en 1976 y se exhibe en 1978, la guerra de Vietnam termina oficialmente en 1975, entonces la película es, mal que mal, una aguja que hurga una herida muy, muy reciente para el pueblo americano.
Con respecto al argumento, les diré que la historia se desarrolla en el Saigón de 1969, nos muestran a nuestro personaje principal (interpretado por Sheen)el capitán Willard anda embrutecido de alcohol, viviendo la vida loca, con una apatía aparente que se manifiesta en las primeras tomas. La CIA irrumpe en su habitación para trasladarlo a un cuartel donde aparecerá un joven Harrison Ford interpretando a un jefe de la CIA, que junto con otros personajes más le dan una misión a Willard.
Su misión consiste en hallar a un tal Kurtz, un coronel americano (interpretado por Brando) que parece haber perdido el juicio, convirtiéndose en una amenaza para el ejército, de tal manera que tienen que deshacerse de él. Willard tendrá que encontrarlo y matarlo, no sin antes advertirle que otros ya tuvieron esa misión, encontrándose ahora bajo las órdenes de Kurtz. Luego Willard se marcha en pos de su misión, la mayor parte de la película transcurre entre el viaje de Willard y los aterradores paisajes que deja la guerra: muerte, locura, desesperación, miedo, etc..
Su primera parada nos muestra a un joven Robert Duvall interpretando al coronel Kilgoore, quizás uno de los personajes más recordados, por su inexplicable indiferencia y sangre fría ante los acontecimientos, además de su obsesión por el surf y la ya, también, famosa frase sobre el NAPALM: Es el olor de la victoria.
El hoy Morpheus de Matrix, en esas épocas dizque tenía 14 años e interpretaba a un joven soldado a quien llamaban Clean, por su obsesión con la limpieza, luego estaba otro personaje interpretado por Dennis Hopper que aparece al final como un reportero onda hippie que parece haber perdido la razón también.
Brandon interpreta al coronel Kurtz, un personaje en el que recae todos los cuestionamientos que se dan sobre la guerra, reflexiones que hacen pensar que tan loco no anda, y que también tiene en su boca una da las frases más recordadas «El Horror, el horror».
Eso por una parte, por otra el final, que los que ya la vieron saben cuál es pero que a mí me confundió más luego de la explicación de Coppola al respecto, porque creo que se contradice con lo que hace el personaje de Willard. Quisera ahondar más al respecto por lo que pediré que quien no haya visto la película deje este párrafo aquí mismo y continúe en el siguiente, porque hablaré sobre partes claves de la película. Bueno, les decía, en Kurtzs se depositan prácticamente las cuestionantes más duras acerca de la guerra, pero me llama la atención lo que Kurtzs narra, recuerdan la escena en que comienza a narrarle a Willard el asunto de los niños que fueron vacunados por los americanos y que luego los vietnamitas les cortaron los brazos vacunados y los amontonaron? ante el horror de los soldados americanos? Kurtzs dice que él toma el camino que toma, porque los soldados americanos no son capaces de esa barbarie, porque los vietnamitas son tan fríos y leales a sus causas que no los frenan niños, ni cosas morales. En otras palabras, Kurtz dice que los americanos ganarían la guerra si hicieran lo que tienen que hacer, es decir si pudieran cometer los actos atroces necesarios para ganar una guerra, tal como lo hace el enemigo, bueno, yo me pregunto, el NAPALM que ·%$»&/· era? un globo de agua?…eso por una parte, por otra parte me parece que el final que Coppola aduce es una lección antimilitarista, donde WIllard se da cuenta que la guerra es una shit y decide cagarse en el ejército, no entiendo entonces cómo termina matando a Kurtz, o sea, si el objetivo es que nosotros veamos que todo es una shit, me parece que no debió darle bola ni al ejército ni a kurtz. Está bien, la guerra vuelve locos a los hombres, pero el personaje de Kurtz tampoco era todo lo revolucionaro que se pretendía pintar. Triste, sí, un personaje doloroso, también, pero no era asunto de Willard solucionárselo, porque mal que mal termina cumpliendo la supuesta «misión», que era matarlo…o no?
Hay otras cosas cuestionables en cuanto a argumento, muchas escenas forzadas, por ejemplo la de los franchutes se hubiera quedado mejor en la sala de edición (tal como estaba antes del redux) no entiendo en qué pensaba Coppola cuando hizo esa escena entre Willard y la madmoiselle, lo del Times (también viene en el redux) horroroso también, por ser, como digo, efectista y manipulador. Lo siento, veo a los personajes dibujados esta vez ya no a merced de la propaganda pro-militarismo americano tan típico de nuestros días, sino de un excesiva necesidad en hacer crítica anti-belicista, lo que nunca será malo, pero desde un punto de vista netamente artístico puede hacerse de manera menos forzada como resultan algunas escenas de apocalipsis now.
Ahora, a nivel de producción, es monumental, fastuosa, excelente, representó un riesgo desde todo punto de vista, a nivel de producción, para su época, es quizás una de las mejores películas. A nivel de contenido, aún perdonándole sus obvios planteos, marcó un hito también, porque no es cosa de todos los días que recién terminada una guerra como la de VIetnam, llegue alguien a hacer algo que prácticamente fue apuntar con el dedo a toda una nación y mostrarle que la guerra no fue color de rosa, que los soldaditos que fueron a Vietnam quedaron marcados para toda su vida por «el horror, el horror».
Apocalipsis Now, una gran película, a la que para variar le pongo algunos peros, pero que definitivamente hay que ver. Un clásico.