LOST IN CONTEMPLATION OF WORLD

TEATRO: La misión (Amassunu)

La misión de la misión

Por: Toto Torres

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La misión, memoria de una revolución, es una obra tan barroca que para hacer sólo una reseña haría falta escribir varias páginas, es de tal complejidad que un análisis de la puesta demandaría un análisis de la historia de las revoluciones y del teatro.

No se ingresa al universo de Müller sin abrir una caja de Pandora, en la obra esta caja se desparrama en el lienzo de la escena, como el delicioso cuadro Bosch, pero más saturado por ser el tiempo (irónicamente) corto y el espacio breve.

Por eso, yo que no quiero perderme esa densidad de agujero negro, esquivo a la obra y me pongo a hablar hoy de lo que circunda a la presentación y que también aporta a la construcción, de forma indirecta pero concreta, del hecho teatral.

¿Quiénes asumen la misión? es una pregunta fundamental para el éxito de cualquier tipo de misión, con quiénes se cuenta realmente. En un inicio, para asumir una misión hay que entenderla, y cuando la organización del festival no se da cuenta que la obra empieza cuando el público entra a la platea y ve a una actriz que está sentada cocinando, cuando se interrumpe esta acción dramática con un largo discurso de premiación y un sorteo, es claro que la misión no se ha entendido y no puede ser asumida como propia, por eso creo que el festival no asume la misión.

Pero a su vez cuando uno pregunta en la mesa de almuerzo y salas de espera ¿qué tal la misión? y la gente conocida te responde:

– Parece que no está muy buena.

– ¿La has visto?

– No, solo la han mostrado en Santiago.

– Entonces…

– Los actores dicen que…

Ahí te das cuenta que tampoco tod@s l@s que actúan en la misión la han asumido, quizás tampoco tod@s la han entendido. ¿Cómo actúas algo en lo que no crees? ¿cómo dices un texto que no comprendes, si la obra no resuena en ti cómo resonará en el público? El elenco en pleno tampoco asume la misión y entonces ¿de quién es esta misión?

¿Qué misión tiene la misión? La obra irá de gira por dos meses a Europa, pero ¿cuántas veces se presentará en Bolivia? ¿cuántos espacios tienen las condiciones técnicas para acoger esta obra, cuántos pueden darles 2 días de montaje, quienes pueden acceder a entradas que cubran el costo de un espectáculo como este? Será que ¿La Misión de una Escuela Nacional de Teatro que funciona en uno de los barrios más pobres de Santa Cruz es una misión para europeos?

Y es que hay que pensar que una obra en tanto acontecimiento social no solo tiene que ver con lo que pasa sobre la escena.

Esta obra no tuvo un conversatorio, pero sí un desmontaje al que no pude asistir, amigas que sí asistieron al montaje comentaban que, a raíz de ciertas preguntas, era evidente esta falta de entendimiento de la propuesta escénica de parte de algunos actores.

Aún así, los pormenores de un desmontaje no justifican ante el público las falencias del espectáculo, a este no le interesa si las actuaciones no logran dar cuenta de la obra o si la puesta está descontextualizada, si la obra no le gusta se va, y hasta el ahora en todas las presentaciones de La Misión siempre hay público que abandona la sala y la obra.

Si ya viste la obra, puntúala!

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FICHA TÉCNICA

Autor Heiner Müller Dirección Matthías Langhoff Elenco permanente de la Escuela Nacional de Teatro (Amassunu) Javier Ambol, Susy Arduz, Fernando Azoge, Selma Baldiviezp Casis, Alana Delgadillo, Jessie Gutierrez, Óscar Leaño, Antonio Peredo Gonzales, Ana Marcela Merdez, Marcelo Sosa y Gabriela Tapia Escenografía Matthias Langhoff y Catherine Rankl Iluminación y sonido Caspar Langhoff Asistente de dirección Carlos Sciaccaluga Administración Mireille Brunet Productor ejecutivo Marcos Malavia (Sourous compagnie)

Coproducción Bolivia Escuela Nacional de Teatro Coproducción Francia CDN Comedie de Caen, Festival Sens Interdits, Théâtre de L’Union, Festival Next, Sourous compagnie y Théâtre de la Ville.

Matthias Langhoff nació en Suiza después de que su padre comunista fuera liberado de un campo de concentración. A los 18 años volvió a Alemania e ingresó al Berliner Ensemble. Durante 20 años se dedicó a la dirección junto a Manfred Karge, impactando al público con su brutal visión de la historia. En 1985 Langhoff se fue a Francia. Continuó con su estilo provocador y barrocas puestas en escena, especialmente adecuadas para el teatro crítico de Müller, las tragedias de Shakespeare, el antiguo teatro griego y las obras de Brecht, O’Neill y Chejov.

Amassunu –que significa “palabras del agua” en lengua originaria– es el elenco permanente de la Escuela Nacional de Teatro (ENT) de Bolivia. Fue fundada en 2013, fruto de los 10 años de funcionamiento de la ENT. Su primer montaje fue La brújula del Chaco, con actrices y actores egresados de la escuela dirigidos por Jean Paul Wenzel. La obra fue invitada a realizar una temporada en el Théâtre du Soleil de Ariane Mnouchkine en 2014, después de la cual realizaron una gira por Europa.

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1 Comentario

  1. De todas las obras presentadas durante el XI Festival de Teatro de Santa Cruz, «La misión» es -lamentablemente- la más prescindible. Que tengan que mostrar en el extranjero este trabajo -tal como está, incluso localmente- es de una fortuna de esas que no se comprenden con optimismo aunque sí con algo de envidia y preocupación: Buena por el tours del que espero gocen los interpretes (no me animo a llamarlos actores, por lo que se vio), por el goce de viajar; pero malo como reputación de una pretendida escuela y, per se, de Bolivia.

    Si algo de genuino tiene «La misión» como hecho teatral es precisamente la confirmación de que ha sido producida por un grupo de chicos de alguna escuela -no precisamente de profesionalización de gente de teatro- y del primer semestre, en el que el tutor los dejó hacer. Si fue por experimentación o negligencia no importa ¡el resultado es el mismo!

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