LOST IN CONTEMPLATION OF WORLD

CINE: Olvidados

Del olvido al no me acuerdo

por: Mónica Heinrich V.

Hay que reconocer que la historia que Olvidados pretende recrear u homenajear es necesaria, válida, dura y con aristas muy explotables en términos históricos, documentales, cinematográficos, y etcéteras.

Esos aciagos años en los que el Plan Cóndor se campeó por toda Sudamérica son sin duda una vergüenza y una mancha en la historia de todos los países involucrados.

La sangre derramada, los desaparecidos, las torturas, las familias rotas, los hijos robados, no dan como para asumir una postura tibia o comprensiva al respecto.

O sea, no hay tales de discursitos sobre la tolerancia y el buen vivir, aquí murió gente, aquí hay algunos que aún no tienen tumbas sobre las que llorar, aquí se rompió un jarrón y roto está. No hay espacio para las corrección política, y mucho menos para la humanización de los verdugos.

Desaparecidos

Por eso, el anuncio de  la filmación de Olvidados  hizo que esperáramos otra cosa, algo similar a lo que menciono arriba, algo equiparable en estatura al título del filme y a lo que evoca.

Desgraciadamente, y para variar, es más la bulla mediática que el resultado, es más la intención que lo que se plasma, es más el alboroto de la alfombra roja que la salida satisfecha de la sala de cine.

Olvidados se queda en un desabrido sancocho de datos picoteados por aquí y por allá con personajes esquemáticos y un mensaje que si somos buenos podemos llamar ingenuo, aunque la palabra que se me viene a golpes y con neón es: tonto.

Y hablo de mensaje porque el cine comunica y comunica siempre, así que pretender que no estés diciendo algo con una cinta que toca un tema tan delicado es absurdo.

La cochabambina Carla Ortiz asume papel de productora y de actriz protagónica y de coguionista de este producto, toma un guión e idea original de Mauricio d´Avis al que le hacen N tratamientos y llama al director mexicano Carlos Bolado para que dirija el rancho.

A estas alturas ya ni dan ganas de saber qué dejaron de la idea original o el papel real de Bolado en la toma de decisiones, como público recibimos lo que recibimos y lo que recibimos fue esto.

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El actor mexicano Damian Alcázar interpreta a Jorge, un general que anda en sus últimos días y que lleva a cuestas un secreto. Ese secreto lo atormenta, porque pobrecito, él- que mató y torturó a harta gente- también tiene su corazoncito y sufre pensando en algunas cosas del pasado. Oh, sí.

Su hijo, que ya hizo su vida en Estados Unidos, es llamado al hogar patrio más o menos para darle el último adiós.

Desde el minuto uno o dos nos bombardean de flashbacks trazando un paralelismo entre el Jorge actual y el Jorge del pasado, entre el viejo atormentado y el sádico milico que obedecía a la dictadura de turno, ese milico que conoció a Lucía.

Carla Ortiz interpreta a la ñoña Lucía, que se encuentra embarazada y que se pasa constantemente la mano sobre la barriga para que el espectador sepa que eso es un bebé y no una hinchazón rarita.

Lucía es pareja de un periodista (interpretado por el portugués Carlotto Cotta) que trabaja para Le Monde, que a su vez es amigo de otros zurdos, que a su vez serán arrestados y torturados por el tal Jorge y sus secuaces.

Uno de los grandes problemas de la película es que subestima al espectador y subraya con marcador fosforescente a los personajes, a los diálogos y a las situaciones. Ejemplo: Las escenas de pareja de Lucía y su marido son empalagosas y cursis al extremo casi casi como una telenovela de Televisa, las escenas de tortura son gráficas y con un tratamiento de color que refuerza la idea de que ahí lo están pasando mal, las escenas de camaradería zurda son acompañadas por Silvio Rodríguez, el Solo le pido a Dios, y los respectivos diálogos donde se sientan las bases pseudo-ideológicas de “ese lado”, no faltan los discursos, las frases hechas sobre «el otro lado» (la derecha), y así. Narrativamente hablando no hay nada que rescatar ya que es un guión plagado de lugares comunes.

El montaje es tan errático y sin rumbo como el argumento, escenas de acción son editadas como aspirando a un thriller hollywoodense, pero a diferencia de otras películas que pueden ser referentes del nicho al que Olvidados apunta aquí se siente cierto tufillo amateur.

Como ya dije, queda una especie de sancocho en el que metieron los ingredientes que dicta la receta pero no supieron bien cómo cocinarlos, dejándonos un platillo en el que toda la película se antoja a un telefilme de baja factura o al episodio de una telenovela donde las actuaciones también tienen el molesto marcador fosforescente.

La violencia o lo gráfico de la violencia están tan mal usados que ni siquiera generan una conciencia real del horror. Al tratar la trama de una manera tan superficial, llegás a las escenas de torturas y algunas risas apagadas se escuchan en medio del público.

Centrándonos en lo rescatable, podemos mencionar que no se ve tan chota como las películas bolivianas que han salido en los últimos años, que además se trata de una mega producción, que supuso un reto a nivel arte, vestuario, y cosas así, que muchos bolivianos participaron, que artistas conocidos del extranjero se sumaron al proyecto, que las empresas se pusieron con el auspicio, que fue una de las mejores alfombras rojas (¡!) que he visto, pero todo eso suena a palmadita en la espalda. Nuestro cine ya debe aspirar a salir del premio al esfuerzo, y a mí como público me da cosita resaltar elementos que en películas de otros países ya están dados por sentado.

Por eso es que es tan importante el guión, la historia, y en este caso doblemente importante al tocar una temática sensible y que conlleva responsabilidades en su manejo. Si hacés una campaña en que mencionás frases de Luis Espinal para promocionar la película, me parece que la velada disculpa a los militares está un poco de más. Esto decía Carla Ortiz en una nota antes de la premier:

«Señores del Ejército, los admiro mucho y valoro su trabajo; en mi filme muestro un periodo de la historia donde lamentablemente parte de los protagonistas fueron militares»

Si Olvidados fuera lo que su título promete, si Olvidados fuera lo que los olvidados y las familias de los olvidados merecen, sería la excusa perfecta para exigir fuerte y claro que se diga dónde están los desaparecidos, dónde botaron a esa gente que ahora es usada para publicitar la película, sería un motivo para que en lugar de disculparse con los militares por “cómo se ven en la película” se exija más bien una disculpa pública por las muertes, por las torturas, por el oscuro papel de las Fuerzas Armadas antes y hoy, porque hoy tampoco hay memoria, tampoco hay un mapita que nos diga dónde recoger a nuestros muertos.

Por ahí la explicación está en lo que Ortiz dijo sobre las intenciones del filme:

“ …es una película que pretende hacer una  fotografía de ese periodo histórico. No pretendemos tomar una posición, simplemente contar lo que pasó en nuestros países” ,

En una premier llena de brillos y lentejuelas, entre agradecimientos y felicitaciones, alguien vaticinaba que Olvidados marcaría un antes y un después del cine boliviano. Al salir a la calle y caminar bajo el manto de la noche cruceña, me quedó la reflexión de que sí, sí tuvo la oportunidad de marcar un antes y un después en el cine boliviano, la tuvo en su temática, en su presupuesto, en sus recursos, pero sencillamente no alcanzó. No alcanzó para tomársela en serio ni como película que no asume posición (como si fuera posible no asumir posición en algo así), ni como cine denuncia, ni siquiera como película comercial que solo aspira a entretener usando un tema duro.

Con Olvidados no pasa nada.

La fotografía que tomaron de ese periodo histórico es una polaroid ajada y fuera de foco, sin otro uso que el de adornar las páginas socialeras y de espectáculos.

Lo mejor: que hay cosas que no se pueden dejar en el olvido

Lo peor: incoherente en su trama, en lo que se dice en la prensa, en lo que pretende y en lo que es. También la humanización del general, esos personajillos tienen un perfil absolutamente carente de remordimientos, son similares al sicario Popeye de Pablo Escóbar.

La escena: el discursito pro tolerancia del personaje Lucía, rozando un razonamiento infantil

Lo más falsete: muchas cosas, pero por resaltar algo la secuencia de Jorge Ortiz no tiene asidero alguno.

El mensaje manifiesto: El cine nacional está en coma

El mensaje latente: No se puede quedar bien con Dios y con el diablo

El consejo: igual vela, alguna conclusión sacarás

El personaje entrañable: los olvidados

El personaje emputante: los verdugos

El agradecimiento: solo por lo que evoca con el título y la temática

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42 Comentarios

  1. Es muy cierto eso que dices que por lo que propone el titulo uno espera alguito mas. Asumo que nadie del equipo que realizo la película vivió en carne propia esos acontecimientos, ya que te aseguro que si eso hubiera pasado la trama y el enfoque seria diferente. creo que muchos que vivieron esa época quizás vean ofendida su inteligencia (no hablo del ejercito) en algún momento.

    Hay que reconocer también que cuesta contar algo que fue real , se tiene demasiados testigos de esos hechos y cada uno con experiencias distintas, el llegar a satisfacerlos creo que seria una tarea titanica, al fin nosotros como los que crearon esta película.. nos basamos en comentarios y relatos de testigos de esa época y nos imaginamos como pudo haber sido y es ahí donde le pelamos.. ya que lo que quizás nos imaginamos nunca fue.

    Pero.. si tocas un tema oscuro y complicado como este, salas la herida que nunca se ha cerrado, y debes ser consciente que tus espectadores o la gran mayoría de ellos… estuvieron ahí… y evaluaran lo que quieres mostrar. Si lo que se quiere es generar $$ ganancia $$ y no conciencia… pues este film puede cumplir con ello, por que para lo otro.. falta y falta mucho.

    • Fabian! pues no sé si haría falta vivir en carne propia los acontecimientos…sino que la visión general de la película es muy limitada. Creo que incluso se si hubieran decidido por una versión libre de los hechos pero estuviera bien filmada o contada, sería bueno, el problema es que está muy mal contada y lo que decís las heridas abiertas reclaman un tratamiento más preciso.
      En todo caso, no sé hasta qué punto generará recaudación en taquilla…porque no termina de ser una película del todo comercial.
      Una pena…
      Saludos!

      • Monica como siempre directa-precisa-brillante en tus reseñas, nunca pero nunca dejes de escribir y ese amor al cine y la lectura. Me agrada leer a críticos de cine nacionales y eres la mejor.

      • Monica dice y resalta verdades que duelen. Pero, que se podía esperar de una ahijada del enano maldito? Jorge Sanjines con la mitad del financiamiento que recibió Carla Ortiz hubiera hecho, sin duda alguna, algo que hubiera valido la pena verla.

  2. Entiendo tu molestia al criticar con gran acierto esta pelicular pero si quieres algo bien echo y algo que llene tus deseos al limite tienes que hacerlo tu mismo suerte con tu peli perfecta XD

    • leooo pues te cuento que he visto películas que me han llenado infinitamente, de esas que cambian la vida y sacuden la mente, el día que pueda hacer una peli decente intentaré hacerla, mientras tanto me declaro incapaz y me quedo como público jejeje…saludos!

  3. «como si fuera posible no asumir posición en algo así» …….frase que resume probablemente el problema central de esta pelicula. Precisamente este es un tema que marcó a la sociedad boliviana (tambien mi padre y consecuentemente la familia entera sufrió persecusión, exilio, patadas en la puerta etc.) Querer quedar en paz con Dios y con el diablo tratando solo de presentar una foto de la época es mediocre rayano en lo cobarde.
    Gracias Mónica por este análisis y que el cine nacional está en coma en lugar de dejar de ganar premios al esfuerzo me deja definitivamente preocupado. Hace ya rato que no hay una sola producción nacional medianamente aceptable. Saludos

    • Querido Pablo, ojalá tengás la oportunidad de verla algún día para sacar tus propias conclusiones, imagino que con tu historia familiar será difícil de ver…igual yo todavía pienso que cualquier rato el cine nacional nos da una sorpresa, no pierdo la esperanza. Slds!!

      • No he visto todavía la película, quiero comprarla pero no se donde (vivo en los EEUU)
        Desde que me entere de su existencia y su pronto estreno, pensé, que puede aportar a la memoria historica de las luchas sociales y políticas del pueblo boliviano una película hecha por una ahijada del mismo dictador? (el enano maldito fue padrino de Carla Ortiz)
        Y financiada por un empresario transnacional?

        • Creo que el principal problema de la película es de por si la adaptación de un guion ya zurcido y remendado por todos lados que no alcanza a esbozar un argumento conciso ya que no ofrece una finalidad clara,por ende una verdadera reflexión de fondo,(que hay muchas pero casi pueriles) por otro lado es triste como se decora y sobrecarga el tratamiento audiovisual para decirte aquí tienes que emocionarte y llorar ,cuando la temática rica en demasía con un argumento solido hubiese alcanzado para algo mucho mas promisorio.En mi conclusión: un esbirro mas de cine «Pop Corn» disfrazado de de película documental que lamentablemente y casi de manera obscena usa una pagina terrible de nuestra historia como un ardid comercial. Saludos!!

  4. Me quedo con lo mejor: Hay cosas que no se pueden dejar en el olvido.
    Lo demás…es mas de lo mismo en el cine nacional; toda emocionada voy al cine esperando mucho y salgo casi sin nada, como pudo pasarle por alto a los realizadores un micro noventero en plenos setenta (o son tan viejos los micros infames que invaden esta ciudad?), uniforme militar mezclado con el policial? Por que nos regalan tanto melodrama novelesco con escenas tan repetidas como un beso bajo la lluvia, en fin con cositas tan absurdas deslucen una trama que pudo ser mas.
    La película debe verse con el único animo de activar nuestro colectivo emocional, jamas olvidar y nunca permitir como país repitamos una época así.

    Monica, vos no nos olvides! por lo menos yo, espero ansiosa tus análisis y comentarios!
    Saludos..

    • Marita pues sí, honestamente yo no tenía muchas expectativas pero el título prometía…NO me percaté de los detalles que mencionás!! jejeje mirá vos! una peli tan grande debe tener sus errores de otro tipo, aunque como lo apuntás lo que le resta del todo es la trama y el melodrama de televisa…una pena no?
      Gracias por las floressss, trato de escribir lo más seguido pero a veces el tiempo no me lo permite, pienso ponerme las pilas para hacer que alcance jejeje Slds!!

  5. El discurso de Carla Ortiz y su actuación pasaron de generar me diabetes a vómitos con su discurso sobre la tolerancia, Ortiz quedo como una actriz de telenovela sobrevalorada…

    • Saúl puej el discurso pro tolerancia bordea lo infantil a lo vomitivo…honestamente, pienso que ellos no se dan cuenta ni ahí de lo incongruente que es todo, lo que lo hace más triste y a Carla hay que reconocerle que le pone empeño, aunque la actuación no sea para nada su fuerte…quizás si algún día alguien la dirige mejor, imaginate que a Salma y a Penélope les han sacado buenas actuaciones alguna vez…quién sabe :p

      • A mi me gustó en Los Andes no creen en dios… hace ya bastante tiempo conocí a una bellísima chola cochabambina que era y se comportaba increiblemente igual a Carla en esa peli

        • yieeee nooooooo…a mí no me gustó! aunque tampoco llegué a odiarla, y el personaje de Carla tampoco era lo más horrible de la peli…recuerdo que lo que más me chocó fue milton cortez por decir algo…hmmm no, no no, qué mala peli…

  6. Pobre e poco inteligente el análisis de la cinta. Fuimos a verla con muchos compañeros de nuestro centro cultural y a los 11 compañeros nos encanto… (a algunos les pareció la mejor película boliviana que habían visto)… A mi no, pero si entra entre mis top 5 (como la 5). Muy buena película!

    • Querido Oscar, supongo que vos y los 11 compañeros del centro cultural son el barómetro de lo bueno y lo malo jijijij. Tranqui, ni vos ni yo somos barómetro de nada, expresamos una opinión y tenemos (evidentemente) gustos distintos. Qué bueno que les gustó y que entre en tu top 5, ayer una conocida me dijo que le parecía una “caca”, sobre gustos y colores…yo no la pongo ni en el top 20.
      Besitos

    • A Oscar le recomiendo ver mucho más cine, pero muuuuucho más… especialmente cine nacional, sin mucho esfuerzo pienso en una veintena de películas hechas en Bolivia, mucho mejores que esta

  7. Todavía no la he visto pero me imaginaba que sería algo así porque conozco a una señora que encabeza la lucha de los hijos y familiares de los desasparecidos de la dictadura en Boliviapor y a ella no le preguntaron nada, ni siquiera intentaron ponerse en contacto con otras personas que realmente conocen el tema y lo vivieron en carne propia. Gracias por tu crítica! Saludos!

    • Lucia, tengo entendido que hubo una investigación y según Carla Ortiz parte de los diálogos son extraídos fielmente de los testimonios de sobrevivientes. No sé, che. Como dije, si estuviera bien filmada, si hubiera una propuesta, si…bueno, tantos si…saludos!!!

  8. Olvidados… me cuesta decir que esta peli es una mierda, pero cuando la producción se basa en experiencias que representan una opinión muy parcializada de la historia y lejos de entrar en un terreno de discusión social, deambulan sobre las fantasías románticas de la justicia y la moral de los roles en los tableros del juego político, reflejando un criterio despintado, que roza el absurdo y la improvisación, los detalles no han sido cuidados y el cine ha sido un juego de quien es el protagonista y quien el director.
    Me emputa esta película porque no tiene nada bueno, y como tal, no transmite nada. El Martin Bullocq dice más con una secuencia y un par de planos, que este sobravalorado reparto de actores telenovelescos en toda la película.
    A mi me consta que la Carlita estaba buscando proyectos de cine boliviano para producir y así usar sus contactos para llevarlo a festivales internacionales usando la escarapela en su maravilloso escote, y sé que el cine creativo no estaba en sus planes porque el rol de producción se quedó en los cánones señalados para Televisa y las idioteces que pasan en Univisión, debes agradar a todo el mundo y no arriesgarte con una historia que te llegue a joder, o a herir.
    Me emputa que el criterio de los bolivianos sea visto a través de estas cojudas obras, relamidas y sosas, el mundo debe pensar que el boliviano está nadando en su vomito desactualizado de arte, despreocupado por desempeñarse dentro de la crueldad y natural barbarie del ser humano, y demostrar que la mentira llamada civilización puede torcerse de manera que llamaríamos hermosas.

    • Grindcore, yo estoy segura que un día Boulocq nos va dar una gran película. De la nueva camada de directores es al que más fe le tengo. Filma bien y sabe. Sobre Olvidados, pues sí, es nomaj lo que es, veo que la gente involucrada no percibe el bochorno, y yo sinceramente creo que el resultado no da ni como para tomársela muy enserio. Es una peli que intentó ser comercial usando el tema de los desaparecidos y que por ahí les funciona en taquilla solo en nuestro país, después no va a pasar nada más…afuera ni siquiera son representantes del cine boliviano per se, ya que la producción está muy ecléctica, así que auguro un paso muy discreto por las cines de otros países.

  9. Me parece que dejar las secuencias de Jorge Ortiz solo en los más falsete es muy poco, toda esta parte me parece que busca comparar a la Bolivia de hoy con la de esos tiempos, es simplememnte estúpida, y también es un insulto al ahora, incluso, en cierta forma me sentí ofendido con esto….

    En todo caso creo que tu crítica es la mejor que se ha publicado sobre esta película

    • Jose, pues sí, como dije sin asidero alguno, más allá del mensaje era muy ridícula en sí misma, quedó como una escena hecha para quemar segundos y atrasar el encuentro del don con su padre, muy al pedo todo…gracias por las floressss…

  10. De acuerdo con toda la crítica, cómo no estarlo! Pero quisiera entrar en el detalle de la «violencia o lo gráfico de ella», en varias críticas se habla del contraste entre la telenovela y la violencia que se muestra. A mi parecer, es un juego de niños. En la peli cuidan mucho de no salpicar de sangre al público y eso se nota bastante, es una película sobre la dictadura y se esfuerzan porque sea ATP o PG-13 máx, no entiendo el porqué. En la dictadura se cometieron peores atrocidades que las que se mostró en esta película. Si realmente quieren mostrar las faltas contra la humanidad de la dictadura, y esto es un deber de cualquiera que proponga un proyecto como éste, que cuenten sin miedo cómo realmente pasó. Las torturas fueron 10 veces peores, ellos destrozaron mental y físicamente a todos los que pasaron por sus manos. Si los directores y/o guionistas de (sólo como ejemplo cito películas que la mayoría vió) «Amistad», «12 años de esclavitud», «carandiru», «ciudad de dios», «un dia de abril», entre muchas otras comerciales e independientes, se hubiesen cohibido de mostrar los verdaderos hechos habrían terminado con productos similares a cualquiera de las telenovelas de narcos colombianas y mexicanas, que ahora están en boga. Como termina siendo «olvidados», una telenovela con violencia y diálogos plomos, rebuscados, innaturales y que hacen que te pregunten, por qué diablos le dejaron escribir a esa tarada? (disculpe mi francés)…
    En fin, que sea otro ejemplo de lo que no se debe hacer (y en todo caso, con quién no se debe hacer). Saludos

    • Qué bueno que mencionás eso!!! a mí en lo particular la violencia no me incomodó. Como es una violencia vacía me parecía bastante intrascendente, y pienso igual que vos, en la vida real hubo mucho más abuso/crueldad del que se mostró en Olvidados, y además si se retratara con algo de veracidad por ahí hasta incomodaba en serio, pero no sé, no me llegaron esas secuencias y tampoco me parecen lo peor de la película. Creo que la dejaron escribir porque fue la que movió el proyecto, yo le rescato algo a Carla, siento que tiene un talento limitado pero con lo poco que tiene empujó esta producción en un país donde cuesta sacar producciones y eso sí lo resalto. Una pena que no haya tomado mejores decisiones que eleven la huevada a otros niveles, una pena el resultado, una pena la película.

  11. Que pena, que triste saber que a titulo de hacer una producción que marcaría la diferencia, ya sea por su originalidad, ya sea por su «mega producción» o los «actores invitados», y el derroche anticipado de falsos vitores, se llegó a tal parodia. De original, ni el nombre… Lamentablemente fuimos testigos de una producción carente de seriedad con la memoria histórica y un insulto a la inteligencia. El bebé de Ortíz nació muerto. De rescatable?.. muy poco, mas es el sabor amargo, sabor a poco con el que uno queda al finalizar la película… Un general decrépito (José Mendieta) como lo fuera Banzer en sus últimos instantes de vida…y con el mismo y enfermizo espíritu de falta de perdón…de dejar que sea el tiempo el que borre las heridas o el » no me acuerdo». Un general que como no podía ser de otra manera nunca denota el mas mínimo ápice de arrepentimiento, y mas bien se sugiere que debemos tener compasión de él. Por supuesto que todos debemos aprender de perdón y misericordia, elementos sin embargo de los que carece el personaje. Quisiera decir: ¡pero la intensión es lo que cuenta!, pero no va por ahí, una temática tan seria no podía tener el tratamiento de telenovela…Pero así estamos, sigamos intentando a jugar al cine y quizá por ensayo y error un día se revierta estos sinsabores.

    • Eddy, pues sí, se perdieron una gran oportunidad…creo que ni siquiera la gente involucrada se da cuenta de lo chapi que es el resultado. Ellos están felices, pensando que han contribuido al cine nacional. En lo particular creo que no da ni para tomársela en serio como digo al final, la aspiración de Carla es una película comercial, y en taquilla le está yendo bien para ser una película boliviana, pero más allá de eso no va a pasar nada. Esperaremos con ansias los nuevos productos bolivianos de los cuales sí podremos sentirnos orgullosos, dicen que hay docu muy bueno y Boulocq también estrena la próxima semana!

  12. De las mejores criticas que leí respecto a la película, que a mi juicio es un nuevo intento fallido, que en palabras de sus protagonistas buscaba levantar el cine nacional y que quedo como solo un intento mas.
    Su reflexión superficial de los hechos y su oda a la violencia que raya en la pornográfica, es un nuevo ejemplo de que los esfuerzos por hacer cine de alta producción (con miles de dólares), rodeada de artistas consagrados y con una pulcritud estética, son solamente pantallazos para ocultar la falta de contenido de un guión claramente débil que resta el trabajo de muchos. Una tendencia que empieza a esbozarse en la producción boliviana, con formas exquisitas y fondos oscuros en tiempos de bonanza.

    • Migue, puej sí, en Bolivia el talón de Aquilés es el guión, DEFINITIVAMENTE. Aunque algunos aún andan batallando también con la parte técnica, pero un buen guión puede salvar una parte técnica mediana, y un mal guión ni la mejor superproducción lo salva. En fin, veremos qué más nos da este añito a nivel de cine nacional. Por ahí hay sorpresas…slds!

  13. A comienzos del año 2007, leí el trabajo original de Mauricio d’Avis sobre su texto-guión que él denominó “Los Olvidados”. Me impactó vivamente que un joven profesional que no vivió los duros tramos históricos del Plan Cóndor, escribiera magníficamente y relatara en forma tan patética los vejámenes a las víctimas de la izquierda política que el nefasto plan internacional de dictaduras había urdido para liquidar socialistas, cualquiera fuese su condición humana y credo religioso, en nuestros países del continente americano.

    El Guión para un futuro film fue concebido por él en Los Ángeles, EEUU, el año 2003 donde concluía su formación profesional de cineasta luego de esforzada labor de investigación, recopilación de datos, información testimonial, lectura de libros, artículos, reportajes, documentos que le permitieron pergeñar un proyecto fílmico de gran valor artístico e importancia histórica, de expresar en arte audiovisual un tema candente que concordaba con el movimiento ideológico político en que estábamos inmersos desde el 2006.

    Inmediatamente lo recomendé a la autoridad correspondiente en el Ministerio de Cultura. Conacine. El Jefe de Arte cinematográfico leyó el Guión, escuchó de labios del autor los objetivos a privilegiar en el mensaje de la futura película: rescatar del olvido a los seres dañados por las tiranías y, castigar la historia real y oscura del Plan Cóndor originado en La Escuela de las Américas de Panamá, donde se entrenaron los militares asesinos. La autoridad cultural, ignara en todo, no entendió el objetivo propuesto por Mauricio; desahució el proyecto-guión de largometraje por considerarlo muy costoso. Mauricio d’Avis Loayza salió frustrado de ese intento de cooperación y patrocinio.

    Han pasado 11 años desde la concepción original del autor Mauricio d’Avis; y hoy, luego de 10 versiones correctivas de mejoramiento, nuevos datos, notas y sufrimientos personales, plasmada en “una gran película de calidad y un largometraje de primer nivel para todo el mundo”, como él autor la califica con elevada experiencia. Manifiesta, con afirmaciones de trascendencia ética, que es muy loable el esfuerzo y la colaboración conjunta entre todos los talentos que lograron realizar la película: “desde los prolegómenos, la producción y actualmente la post-producción, nacionales e internacionales, de todos quienes llevaron adelante su propio proyecto cultural”.

    El éxito del film boliviano producido por la artista Karla Ortiz está asegurado en todos los aspectos: dirección, sonido, imagen, actuación, son impecables y meritorios. La valía de Mauricio d’Avis también es inobjetable. Un futuro de realizaciones profesionales en el campo de la cinematografía depara a ambos creadores. La productora reconoció reiteradamente la concepción original de d’Avis, más, introdujo contenidos ulteriores muy importantes para lograr la realización fílmica perfecta.

    He leído, disgustado, algunos de reprobación de la película Los Olvidados en “Ramona” el 3 del presente mes. Destilan maldad crítica que el suscrito cuestiona firmemente porque banalizan todo un esfuerzo colectivo profesional loable que más bien amerita apoyo por tratarse de una gran iniciativa y autoría boliviana que devela sin temor la sórdida historia criminal.

    No acepto el maniqueísmo en general, dado que no existe el bien y el mal absolutos, ni en la conducta ni en el intelecto humano, pero en cuanto a principios éticos de trasunto moral, la doctrina es taxativa. Privilegiar la vida y la dignidad de persona.

    Otros principios bioéticos de la comunicación a considerar son: la beneficencia, la justicia, veracidad y la no maleficencia; ésta última está ausente en los artículos de la “Ramona”.

    La tortura y el genocidio son delitos de lesa humanidad. En Bolivia, existe antecedentes desde el nacimiento patrio: La Recoleta, Las matanzas de Yañez, Melgarejo, Coati, el Control Político, San Juan, Tolata, Terebinto, Curahuara, Coro Coro, cuartel de Viacha, Achocalla, campos de concentración, San Pedro, Chonchocoro, Regimientos transformados en cárceles y hasta casas particulares. Tiempos del MNR, gobiernos de Banzer, Natush, García Meza, Arze Gómez, y los civiles acompañantes; con artistas de la tortura que requieren varios films: Ariñez, Menacho, Gayan, Pepla, Bloomfiel, Claudio San Román, Barbie Altmann; Cassis, Curys, Nelson Jordán, Mario Jordán, Abraham Baptista, los Alarcón, Benavidez, Mena, Salamanca, Rafael Loayza, Toto Quintanilla, Selich, Adett Zamora, (*) (**) expertos en aceite de camión, picanas, siglas en la piel, tímpanos perforados, violaciones, enfriamientos, todo inadmisible y en trance de olvido.

    La película boliviana “Los Olvidados” tiene el mérito de incitar a comentar, reflexionar, aprender y rescatar terribles historias para rectificar y educar el alma de las generaciones a venir y jamás aceptar el terrorismo de Estado.

    Comencemos recordando la verdadera significación y el patetismo del evento genocida del Plan Cóndor y sus consecuencias en los países donde fue aplicado. Fue el acuerdo criminal más infame que jamás existiera en la historia americana, por supuesto dirigido desde el Imperio y sus agentes, como asegura el film. Planificado y ejecutado por militares y civiles, sicarios nacionales y extranjeros, asesinos. El resultado fue desastroso, lo dice uno de los críticos: 30 mil desaparecidos, 50 mil asesinados, miles de torturados, expatriados. Las víctimas del norte chileno. Tocopilla, miles de torturados, Sergio Arellano Stark, Marcelo Morón, Sergio Arredondo, Pedro Espinoza, en La Caravana de la Muerte. Testimonio que en Santiago asesinaron a dos condiscípulos: Iván Insunza, idealista del comunismo y benefactor de las villas miseria fusilado en el estadio, y Gabriel Castillo, psiquiatra soñador de bellezas, muerto en la puerta de la Iglesia de San Francisco en la Alameda; a Víctor Jara, al boliviano Ríos Dalenz.

    El Gral Contreras, dinamitó a un médico en Tocopilla, se encontraron sus manos al fondo de una mina; Salvador Allende, asesinado con misiles de altura en el Palacio de Toesca según asegura mi profesor Girón que le atendió hasta la muerte. En Chile, Argentina los asesinatos de Letelier, J. J Torrez. A Martín Almada, paraguayo, le mataron la esposa, a él torturaron en prisión pero logró rescatar los documentos que incriminan a los autores de todos los países involucrados. En Viacha asesinaron a Enrique Ortega y al Dr. Daniel Arroyo, bajo tortura despiadada. Al Prefecto Alberto Guzmán y a su esposa la Dra. Rina Tapia, cochabambinos, los tomaron presos, torturaron, vejaron, con contusiones y fracturas costales, simulacros de fusilamiento, exilio definitivo. En la prisión de Viacha, la médica atendió el parto de una prisionera, la recién nacida fue llamada:“Libertad Bolivia” y vive en La Paz. Una constancia revela que en IX-X de 1971 había más de 700 presos en Viacha, entre los cuales estaban Luis Luksic, René Soria, Alberto Guzmán, Nivardo Paz, Rina Tapia, Ñuflo de Chávez Ortiz, Jesús Lara, Mary Alvarado, Juan Iriarte, José María Alvarado, Felipe Iñiguez, (30 médicos presos). (****)

    En La Paz, la UMSA bombardeada, rodeada de tanques y los universitarios que salían con las manos en alto acribillados, asesinado mi entrañable sobrino Adrián de La Torre luego de interceder ante el comandante en jefe que se nombra en el film, y de salvar a los estudiantes del comedor universitario; su compañero Carlos Bayron que desapareció en un campo de concentración cuyo cuerpo, junto a la de otras víctimas, cubrieron con pavimento. (*****)Todos estos testimonios no pueden quedar en el olvido y deben ser crudamente expuestos, relatados, filmados, aunque den asco a los jóvenes críticos que no tuvieron la vivencia de esa ignominiosa realidad genocida. El film “Los Olvidados” pudo haber sido aún mucho más cruel para lograr el objetivo propuesto, pero mantiene un nivel bajo de violencia confrontada con la realidad, la gravedad del terrorismo de Estado, la delincuencia política y la bajeza humana. Apenas unas picanas en los pabellones auriculares, cuando en realidad fueron polos eléctricos introducidos en el intestino terminal y en los genitales o en el cráneo para generar convulsiones epilépticas. Algunas inmersiones en turril de agua limpia, cuando la verdad fue diferente: los cuerpos de las víctimas envueltos en alambre de púa, inmersos en turril de deposiciones hasta la asfixia. Puntapiés, golpes de puño e insultos groseros; amputaciones de manos (Víctor Jara), fracturas y contusión de vísceras, explosión de cuerpos dinamitados, torturas inquisitoriales ejecutadas por torturadores acompañados de médicos que controlaban los signos vitales para detener o reiniciar torturas que no lleguen al paro cardíaco (***). Luego, en aeronaves para dejarlos caer vivos al mar, a los volcanes, a los ríos. Violaciones multiplicadas hasta el embarazo, para robarles el recién nacido e inscribirlos como suyos, activos delincuentes de la identidad personal. Todo esto, no está revelado en la película por delicadeza ética, protegiendo la salud mental de los observadores.

    El film tiene nobleza en el propósito, también en la reproducción de la verdad histórica, aunque un tanto restrictivo por todo lo expuesto. Los críticos creen que el objetivo del film fue distraer, están equivocados, se persigue recordar, jamás olvidar a los olvidados, y sancionar esa gesta de criminalidad que avergüenza la historia americana. Reitero, el film es respetuoso de la sensibilidad afectiva; quizá prolongado en el tiempo de exposición, pero tensamente informativo y patéticamente real, tal como sucedieron los hechos; cruel como la imaginó Mauricio d’Avis; verídico como la gestó la inteligente productora y protagonista Karla Ortiz. La artista logró humanizarla con sus reflexiones correctas, los parlamentos y los debates cargados de sentimiento en la interioridad del sufrimiento humano. Es una película bio-ética e histórica para seres de mentalidad reflexiva.

    En cuanto a las críticas anotadas, son puntos de vista que no comparto en absoluto. Afirmo que en el film “Olvidados”, la ficción emerge de una realidad histórica tenebrosa, no descuida los testimonios sombríos. Todo el contenido merece consideración, con sentido constructivo por supuesto. Existieron los ambientes de tortura, iluminados, y montados para la tortura, no se inventaron. Los regueros de sangre, las aniquilaciones sumarias, los cuerpos heridos, las cacerías. El amor al interior de la tragedia, ocurrió porque esa es la condición humana. Los “tortolitos” es una expresión peyorativa de los críticos. “Espectacularizar las torturas” no es suficiente ante las evidencias relatadas. Villa Grimaldi fuera de Santiago, Centro Borgoño tras el Mapocho, donde inicié mi estudio de medicina, existió, casi me torturan por tomar fotografías de evocación; el propio Estadio que hoy lleva el nombre de “Víctor Jara”.

    La calificación: “Broma de mal gusto que Lucia se despache una lamentable reprimenda contra los militantes torturados a los que trata de delincuentes, asesinos, que han escogido el camino de la política, víctimas de los gorilas represores, sugiere una mirada tolerante y hasta justificadora de los torturadores y sus acciones, olvido travestido de perdón hacia sus verdugos”, es una opinión fuera de contexto que tergiversa la intención humanista de la mujer gestante. “Cinta que Banzer y sus acólitos estaban esperando”, creo que es un despropósito, pues los responsables deben estar de viaje, atemorizados ante la evocación terrorífica de su conciencia. La crítica: “Película apta para parte de ¡éste país! acostumbrado a olvidar a sus caídos y redimir a sus torturadores verdugos y dictadores”. Justamente es todo lo contrario, con ella se logra rescatar el recuerdo para toda la América mellada por el Plan Cóndor que exige sancionar el delito y prevenir otro Plan siniestro que podría repetirse en cualquier momento y con cualquier gobierno militar o civil.

    Afirmo que el film no tiene adscripción política-partidaria; pero es esencialmente política en el concepto más puro del término. No sólo rescata a los olvidados, más bien en silencio y en forma subliminal, in crescendo, previene contra los atentados a la democracia, a los DDHH, al irrespeto a la dignidad de persona, a la tiranía, a la posibilidad de tortura organizada desde las esferas ejecutivas, cualesquiera fuese su ideología imperante. Creo que la Providencia de la Patria maneja sutilmente a Karla Ortiz para regalarle un presente oportuno en el tiempo histórico actual.

    Yo expreso mi homenaje al esfuerzo profesional y artístico de todos los creadores del hermoso film “Olvidados”, película que debe ser vista por todos los bolivianos, chilenos, argentinos, uruguayos, paraguayos y brasileros; por todo el mundo civilizado. Merecido fue el encendido aplauso tributado al término del film en la Premier. La crítica debe ser tomada en cuenta cuando es constructiva. La postura reaccionaria es previsible dado el grave contenido del tema expuesto. En cualquier tendencia existen dogmáticos que pueden repetir la hazaña criminal y, que enarbolan la bandera de la violencia. Felicito al Guionista Mauricio d’Avis, y aplaudo de pie a la actriz productora Karla Ortiz, consagrada en la película boliviana “Olvidados”.

    Bibliografía.

    Guzmán López Alberto. “Memoria Popular Sobre las Torturas del Septenio Negro de Banzer” BOLIVIA LIBERTAD”. Editorial TIWANAKU. La Paz. Bolivia. VI 1993. (*)(****)

    Loayza Beltrán Fernando. “Campos de Concentración en Bolivia”. Editorial “E. Murillo” La Paz. Bolivia. 1966. (**)

    Varios Autores. “El Quijote y los Perros”. “Antología del Poder Político”. Antezana E. Luis Viacha Campo de Concentración. Lara Jesús. Un día en el antro fascista”. Editorial Imprenta Universitaria Cochabamba. Bolivia 20 VIII 1979

    Riquelme U. Horacio. Ética Médica en Tiempos de Crisis. Los Médicos y las Dictaduras Militares en América del Sur. Ed. Chile América –CESOC Santiago de Chile 2002 (***)

    Rodríguez De la Torre Lidia. Testimonio. (*****) Cochabamba Bolivia. VIII-2014.

    Cornejo B. Gastón. Escritos Dr. Alberto Guzmán- Dra. Rina Tapia de Guzmán. Opinión. Cochabamba. X- 1998.

    Vargas Llosa Mario. La Fiesta del Chivo. Alfaguara Bolsillo. Quebecur Perú.2000.

    Verdugo Patricio. “Los Zarpazos del Puma”. La Caravana de la Muerte. Chile.

    15 septiembre 1973. Ultimo versos de Víctor Jara cuya copia atravesó las alambradas y voló a la libertad en el “Estadio Chile. A cinco días del golpe en Chile, el mundo entero estremecido alzaba la voz levantando las figuras de Salvador Allende y Víctor Jara .

    “Somos diez mil manos menos/que no producen./¿Cuántos somos en toda la Patria?/La sangre del compañero Presidente/golpea más fuerte que bombas y metrallas./Así golpeará nuestro puño nuevamente./Canto, qué mal me sales/cuando tengo que cantar espanto./Espanto como el que vivo/como el que muero, espanto”.

    *Gastón Cornejo Bascopé. Presidente de la Unión de Poetas y Escritores. De la Sociedad de Geografía e Historia Cochabamba, agosto 2014.

  14. Reproducción completa del artículo: UNA VISIóN POSITIVA DE LA PELíCULA DE CARLOS BOLADO
    El film Olvidados y una crítica cochabambina. Ensayo histórico literario
    *GASTÓN CORNEJO BASCOPÉ | 24/08/2014

  15. Qué increible la saña de la que firma como «aullidosdelacalle» con respecto a la película Olvidados y de repente está bien que ese sea su seudónimo porque es realmente un alarido penoso su opinión, desquilibrada y poco ecuánime. Y si bien es cierto que cada uno es libre de tener su opinión, y con eso la aulladora descarga su conciencia, pienso que una crítica válida debe ser equilibrada y acá, nuestra amiga se refocila en cosas que ni siquiera conoce.

    Yo viví en Chile, a través de amigos muy queridos, la experiencia de la dictadura y puedo decir con conocimiento de causa que Olvidados refleja muy bien lo terrible que eran estos milicos de doble personalidad ( bipolares le dicen hoy) que amaban a sus familias y sufrían por ellas, pero no tenían problemas en matar y torturar. Los nazis de los campos de exterminio eran lo mismo. Un amigo que sufrió todo esto, precisamente recuerda que en los momentos de tortura, lo que le venía a la mente eran sus seres queridos y que la ideología le importaba nada. Conoció a gente que se enamoró y se amaron en esos terribles momentos a sabiendas que mañana estaría muertos. Ahora si eso te suena cursi, querida, te falta mucho para conocer de la vida.

    Tampoco creo que sea la mejor película sobre esos años tenebrosos, pero si creo que está entre las mejores que he visto. Si bien es cierto que hay un tratamiento exagerado de la violencia, también es cierto que el tema de la tortura ya asesinato impune es lo que se trata de mostrar a las nuevas generaciones donde a ellos les encanta series de zombies y peliculas como 300, o la nueva versión de Espartaco, donde la sangre, literalmente, salta a la pantalla.

    En fin, si bien me dirás estimada aulladora que todos tenemos derecho a opinar, por lo tanto allá tú con lo que escribiste, y acá yo con lo que opino. En todo caso, te sugiero que si quieres que te tomen en serio, seas más equilibrada en tus criterios y en segundo lugar, por favor, yo que también soy camba, no escribas sustituyendo las «s»por las «j». ya que aparte de verse horrible, dice poco de tu capacidad de escribir y tu amplitud de criterio.

    saludos

    mario requena

    • Querido Mario Requena, no hay ninguna saña solo tristeza. Gracias por comentar y por las amables sugerencias. La mayor parte de las reseñas son mías, Mónica Heinrich, y de hecho se publicó con mi nombre en algunos medios, así que no es seudónimo y no se está ocultando nada, ni hay felino cautivo al respecto. Sugiero que amplíes tu visión de lectura y verás que debajo del título dice: POR: Mónica Heinrich (significa que lo escribí yo mismita) Lo demáJ…hmmmm déjame ampliar mi capacidad de escribir…a ver, a ver…ejte…nop, no sale. Celebro que te haya gustado Olvidados, intentar convencerte que es mala es como que vos intentés convencerme de que es buena. Mala decisión. Bsitos.

    • Mario, si no sabes quien es la que firma como aullidosdelacalle y con lo que dices de Olvidados: queda claro que hablas al pedo, ya que no conoces a Mónica una de las más seguidas críticas de cine en Bolivia; y que solo viste mitad de la película, digo mitad porque claramente no entendiste el mensaje y lo que busca expresar esta maildita película

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